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FASHION FILM![]() ![]() GUADALUPE MECA RAMILO GRUPO 4 Índice FASHION FILM
¿Qué es? Hablar del fashion film es hablar de un nuevo genero experimental, que todavía esta desarrollándose, y por lo tanto en un constante cambio. A medio camino entre el videoclip, el spot publicitario y el cortometraje, el fashion film es un género experimental en pleno auge. Surge con la intención de ser un nuevo lenguaje dentro del mundo de la moda, un nuevo soporte publicitario que esta cada vez más extendido entre las firmas de moda para dar a conocer sus nuevas propuestas o proyectos exclusivos y dar respuesta a las nuevas necesidades de consumo a través de Internet. Con el fashion film las marcas dejan de ser esclavas de los 30 segundos de los anuncios tradicionales, y la televisión, antes protagonista indiscutible, deja de ser el soporte principal en pro de ordenadores, androids y tabletas. Aún es pronto para saber exáctamente qué es y dónde están sus límites, pero podríamos definir el fashion film como una pieza audiovisual, por regla general de corta duración (entre 1 y 5 minutos), con una rica estética visual heredera de la fotografía de moda y una narrativa a caballo entre el vídeo musical, el spot publicitario y el corto de ficción. ¿Para qué sirve? Son piezas de autor con un trasfondo artístico que buscan comunicar la esencia, el universo de la marca de forma original y creativa. Son películas en las que la moda es el protagonista. No se trata de hacer publicidad sin más, sino de transmitir una experiencia. Es un producto que permite a las marcas convertir su comunicación en algo exclusivo, porque hoy en día hay que diferenciarse. El público al que van destinados estas “pelis de moda” no puede alcanzarse a través de los medios tradicionales. En la elaboración del fashion film se involucran artistas de todo tipo: fotógrafos, ilustradores, directores de cine, diseñadores… Fuera de nuestras fronteras el fenómeno está algo más consolidado, como es bien sabido España siempre va a remolque de países pioneros en el sector moda, como puedan ser Francia o Inglaterra. Lo cierto es que desde 2008 el país vecino acoge uno de los festivales más importantes de cortos de moda, A Shaded View On Fashion Films (ASVOFF), capitaneado por la diseñadora y crítica de moda americana Diane Pernet. Se celebra en París de forma paralela a la Paris Fashion Week y se ha convertido en todo un referente. Después se sumaría el Berlin Fashion Film Festival (BFFF) que con tan sólo tres años de vida ya apunta maneras. Existen tambien otros como el New York fashion film festival (NYFFF), Miami Fashion Film Festival (MIAFFF), La Jolla Fashion Film Festival (LJFFF). Ciudades como Tokio, Singapur, Sao Paulo, San Francisco, entre otras también acogen a festivales de este tipo. Este 2013, tras comprender la importancia que este tipo de piezas audiovisuales han ido adquiriendo en el sector, se ha subido al carro la capital española con la primera edición del Madrid Fashion Film Festival (MFFF), que ha demostrado que también hay talento entre nuestras fronteras, aunque quede mucho camino por recorrer. ¿Cuándo empezó? Si nos remontamos a los orígenes de este genero y hacemos un breve recorrido histórico fue seguramente The Serpentine Dance (1899), de los hermanos Lumière el primer fashion film de la historia. En él se ve a una mujer haciendo volar su vestido que cambia de color mientras ella gira sin parar como una peonza. La pieza está considerada como uno de los primeros ejemplos de video-arte de todos los tiempos. Ya en siglo XX las grandes marcas con fragancia propia serían las primeras en adoptar la pequeña película como mecanismo publicitario. ¿Cómo son las mujeres que utilizan el perfume? En la mayoría de los casos se recurre al hilo conductor de la historia de amor con grandes dosis de atracción y seducción. Muchas veces se cuenta con rostros conocidos como protagonistas. Hace ya quince años apareció en Londres y Nueva York una nueva manera de retratar la moda. Con una industria cansada de las limitaciones de la fotografía, algunos artistas emergentes empezaron a investigar el potencial del vídeo. Por un lado, este consistía en una alternativa revolucionaria ante un mercado que pedía a gritos un soplo de aire fresco. Por otro, suponía el adiós a toda una era de principios, métodos de trabajo y profesionales consagrados que habían protegido su legado sin permitir ningún cambio. Se trataba de una lucha gradual e inconsciente entre el conservadurismo artístico y la experimentación creativa. Algo así como una versión actualizada de la batalla que se lidió entre la pintura y la fotografía a finales del siglo XIX. Pero, justamente en ese momento de crispación, irrumpió en la escena el fotógrafo británico Nick Knight, una figura decisiva para el desarrollo y la consagración del video. Él, como ningún otro, supo predecir las necesidades de la industria y sentó las bases de lo que más tarde llamaríamos ‘Fashion Film’. Gracias a su experimentación constante, Knight consiguió que este nuevo formato se materializara y empezara a consolidarse como un lenguaje propio. Como una herramienta en la que, tarde o temprano, con la revolución digital, las nuevas generaciones se verían reflejadas. Es precisamente esta revolución la que llevó a Nick Knight a crear SHOWstudio en el año 2000: una comunidad virtual de creadores que, a través de sus vídeos, ponían al alcance de cualquiera los últimos fashion films del momento, entrevistas a diseñadores o modelos, y retransmisiones de los principales desfiles de cada temporada. Con SHOWstudio nació una nueva etapa para todo aquel que deseaba consumir moda más allá de los editoriales en las revistas. A partir de entonces, ante el usuario se abrió todo un abanico de posibilidades que transformó la manera de comprender la industria. Descubrir qué sucedía detrás de las cámaras formaba ya parte de la ilusión del negocio. Conocer de cerca la vida de las supermodelos significaba un doble juego: nos permitía convertirnos en voyeurs y humanizar a aquellas mujeres que tanto habían sido criticadas por su superficialidad. Quince años después de la revolución de Knight, en la actualidad las grandes empresas de moda aún observan con timidez el fashion film. Sin embargo, en la otra esfera de la creación, todo un séquito de artistas audiovisuales ha empezado a tomarse las cosas en serio. Y es que, finalmente, han comprendido los beneficios que el movimiento de la imagen puede aportar al producto cultural de una marca. Mostrar las prendas acompañadas de historias, sonidos y sentimientos, permite generar en el cliente un imaginario mucho más fuerte que el de cualquier fotografía. Con el fashion film, las intenciones comerciales se disuelven y, ante esta débil pérdida de la persuasión, el consumidor se convierte en un nuevo espectador. En alguien que, además de asistir al cine, leer libros o ver la televisión, decide darle al play y adentrarse en el mundo ficticio que se le presenta ante su pantalla. Otra gran iniciativa ha sido Nowness creada por el grupo LVMH y que se autodefine como una plataforma de la cultura global de la narrativa digital, en la que se estrena contenido exclusivo cada día. Un punto de encuentro para gente con inquietudes culturales y un punto de referencia para los líderes en medios de comunicación y estilo. En definitiva una comunidad creativa que acoge el trabajo de artistas excepcionales. Cabe decir que el sitio web no se centra exclusivamente en moda. También debemos mencionar que las grandes cabeceras de moda en papel han ido adaptando sus contenidos al soporte digital, y a día de hoy proliferan las creaciones audiovisuales a modo de editoriales de moda en movimiento generadas desde revistas como Vogue, L’Officiel, Metal Magazine, Fantastic Man… ¿Cómo es? Los fashion films, o cortometrajes de moda, ya se han establecido como una herramienta más a la hora de presentar una colección o transmitir los valores de una marca casi al mismo nivel que los desfiles. Este género audiovisual cuenta con sus propios códigos, diferentes de los de un cortometraje convencional. “Un buen fashion film debe tener una estética cuidada (heredera de la fotografía de moda), ritmo narrativo y un punto de inflexión, algo que lo haga memorable, pero sobre todas las cosas, es importante que tenga un buen concepto detrás”, explica José Murciano, director del Madrid Fashion Film Festival. “Creo que también ha de ser fresco, espontáneo, divertido y hasta sorprendente, debe ser más sensorial que persuasivo, ha de interpelar las emociones y, aún teniendo un componente comercial, abogar por el arte y la experimentación”, puntualiza. “Normalmente, en los fashion films creas una historia ‘excusa’ que te sirve de hilo conductor, aunque esta luego quede totalmente rota en el montaje”, explica el fotógrafo Eugenio Recuenco. El también realizador ha dirigido varios filmes para Nina Ricci y Loewe, entre otras marcas, con su característico estilo onírico y fantástico. “En contrapartida estás obligado a enseñar un producto, la suerte es que al final es ropa en la mayoría de los casos, y para contar muchas de mis historias necesito ropa, con lo que tan solo tengo que adaptarla”, continúa. “También hay que tener en cuenta el ritmo; esto es de un consumo más rápido y muchos consumidores de fashion films no están por la labor de invertir su tiempo en algo más cinematográfico”, señala Recuenco. Lejos van quedado las secuencias vacuas protagonizadas por chicas bohemias. Los clichés de los fashion films fueron objeto de parodia en un cortometraje de Vena Cava en el que la actriz Lizzy Caplan (de la serie de televisión Masters of sex) escuchaba discos de vinilo, tocaba el ukelele y tecleaba en una máquina de escribir, burlándose de los tics hipsters en los que suele caer una marca primeriza. “Solo porque aparezca alguien moviéndose delante de una cámara no hace que sea una película”, decía Diane Pernet, la impulsora del festival A shaded view of Fashion Film, en una entrevista con Business of Fashion. El objetivo del vídeo puede ser presentar un nuevo producto, crear imagen de marca, o acercarse al público digital. De la estrategia de la firma dependerá la concepción de la minipelícula. Uno de los formatos más populares en este momento es el vídeo didáctico, en el que se transmite la historia de la marca a través de animaciones que reafirman sus valores corporativos. La serie de Chanel sobre sus prendas icono o los making of de las colecciones de alta costura de Valentino son algunos de los ejemplos de esta categoría. Salvatore Ferragamo apenas acumulaba unos pocos cientos de visualizaciones en su canal de YouTube. Hasta que decidió producir una comedia romántica dividida en ocho miniepisodios protagonizados por Kaya Scodelario (de la serie británica Skins) vistiendo ropa de la marca. Algunos de ellos han superado las 100.000 reproducciones, un gran porcentaje de ellas por parte de un público mucho más joven del que suele frecuentar las tiendas de la marca. “Los fashion films acercan los contenidos a un nuevo público objetivo, que lejos de sentirse invadido por la publicidad en la televisión, comparte el contenido en redes sociales y lo comenta en blogs y plataformas digitales”, apunta José Murciano. El poder de viralización y la efectividad de este formato han hecho que los fashion films se presenten como una alternativa plausible a los desfiles. O al menos, como un buen complemento. Resulta más atrayente visionar una minipelícula con cierta coherencia narrativa que ver un desfile en el que solo aparecen modelos andando por una pasarela (salvo grandes excepciones, por supuesto). Murciano añade: “[Un fashion film] sirve para potenciar y hacer llegar el imaginario del diseñador, el mundo que ha creado en esa colección, sus inspiraciones, sus referentes, a muchas más personas”. Fashion Films Grain Supply Co x Yoko Honda Film sobre la colección de bañadores de Grain Supply Co x Yoko Honda. Dirigida y producida por Codea Con: Jessica Goicoechea, Helena Saigi, Anna Villarroya DOP: Quim Güell Director de Arte: Anna Villarroya Asistente de producción: Mireia Sarabia Amazing para Elle-Tous noviembre 26th, 2013 Tous El proceso del descubrimiento de la joya hasta su disfrute pasando por el construcción del collar, es la base del nuevo fashion film para Elle-Tous. Dirigido por Nahuel Lerena, guión de Inmaculada Jiménez e interpretado por Flavia de Oliveira, cuenta con la aparición estelar de los Sres. Lazy Oaf & Nasty Gal Collection por Sam Hiscox mayo 28th, 2013 Nasty Gal Formato entre videoclip y spot para presentar la colección de Lazy Oaf y Nasty Gal dirigido por Sam Hiscox. Miracle para Vanessa Bruno mayo 14th, 2013 Vanessa bruno Una nueva entrega dirigida por Stephanie di Giusto e interpretada por Lou Doillon y Jessica Joffe titulada Miracle para Vanessa Bruno. Surface to air S/S 2012 – el Principio mayo 8th, 2013 Surfacetoair Gran fashion film que muestra claramente su marca de la manera más sugerente… “Reincarnation,” de Karl Lagerfeld ft. Pharrell Williams, Cara Delevingne y Géraldine Chaplin diciembre 25th, 2014 “Reencarnación” es el nuevo fashion film creado y dirigido por Karl Lagerfeld para acompañar al CHANEL Paris-Salzburgo 2014/15 Métiers d’colección de arte que se mostró el 2 de diciembre de 2014 en Salzburgo. Boytanica de Kevin Calero diciembre 25th, 2014 Cuatro apuestos floristas llevan esta película a una fiesta visual para que sean evaluados arreglos florales en este homenaje a Busby Berkeley. Proyecto encargado por la floristería residente BouquetFleuriste florista del Ritz Carlton. Una película de Kevin Referencias Manuel Álvarez, J. FASHION FILM. Proyecto y realización audiovisual. Universidad Complutense de Madrid, España. Páginas web: http://www.canalplus.es/fashionfilms http://www.itfashion.com/moda/videos/historia-de-un-fashion-film/ http://elpais.com/elpais/2014/11/05/estilo/1415200263_760078.html http://www.trendencias.com/marcas/fashion-films-marketing-arte-o-simplemente-humo http://fashionfilms.es/page/2/ |
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